- 4 alcachofas
- 1 limón
- Aceite de oliva
- Agua para el remojo
- Sal
Lavar y quitar las hojas duras de las alcachofas, cortarlas en cuarto quitarles las barbas y después en juliana.
Ponerlas en agua con limón para que no se oxiden.
En una sartén grande calentar aceite de oliva.
Freír las alcachofas hasta que este crocante.
Ponerlas sobre papel de cocina para que absorban el aceite.
Salarlas y servirlas de la forma deseada.
J. M. Occhi - 09 · Mayo - 2022

La alcachofa tiene orígenes de Oriente Medio y ya era conocida en la época de los egipcios tanto con fines fito terapéuticos como alimenticios. Su llegada a Italia se debe a los etruscos y así lo atestiguan las numerosas representaciones de hojas de alcachofa en capiteles y bajorrelieves en los templos egipcios y orientales. Hacia el año mil los árabes la descubrieron en Sicilia y desarrollaron una nueva variedad que trajeron a España..